"Los rayos concentrados propiamente dichos dirigidos desde nuestra hermandad alimentan y estimulan el desarrollo en todos los particulares Dones Divinos, talentos, poderes y maestría en general en el sentido que realiza su Plan Divino en el plano terrenal. Ojalá la humanidad también desarrollara tal fe y confianza en la perfección última a ser expresada a través de cada miembro de la raza humana.
Desafortunadamente, la mayor parte del género humano se juzga entre sí por la personalidad externa, y los condena en la presencia de sus idiosincrasias personales (que son de naturaleza temporal) más que juzgarlos según lo dijera una vez el amado Jesús, "según recto juicio" (sosteniendo por ellos el concepto inmaculado de su eterna Divinidad). Me gustaría sugerir humildemente que la fe y confianza en el NÚCLEO DE BIEN (Dios) en cada hombre también sean incorporados en el sentimiento del chela fervoroso!
Esto no quiere decir que el individuo discernidor tenga que aceptar o condonar las imperfecciones de ninguna personalidad (sea audible o silentemente) , ya que esto no es más mal que bien, significa que cada chela sincero debería empeñarse por realizar plenamente que dentro del corazón palpitante de esa personalidad habita el Santo Ser Crístico de Perfección que cuando se le estimula amorosamente , puede exteriorizar y (esterioriza) Su Perfección Divina a través de esa personalidad, finalmente transmutandola por completo.¡Gracias por su empeño para hacer esto!"
Tomado del libro: Diario de el Puente a la Libertad (Pablo el Veneciano)
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